viernes, 25 de enero de 2019

EL AGRADECIMIENTO



El agradecimiento es un sentimiento
de reconocimiento y cariño,
de correspondencia a un afecto recibido.
Es el espejo de la solidaridad,
de pensar en el otro,
de la ayuda, de la bondad…

Agradecer entraña
un doble acto de amor:
el que tú recibes de otro,
que llega a tu corazón;
y el que a él le devuelves,
que cierra el ciclo de amor.

Es un gesto de respeto.
Premias su condición,
resaltas su generosidad,
su afecto desinteresado,
y que en hacer el bien se ha volcado.

 Agradecer es un acto de humildad.
Muestras que has recibido ayuda,
que ilimitado no eres;
que unas veces tú la das,
y tú, la necesitas otras veces.

Refleja que otros te quieren
y que contigo están.
Que puedes contar con ellos,
con su afecto,
y su amistad.

Ante el cariño recibido,
solo cabe que respondas
como una persona noble,
dando las gracias, y devolviendo
ese cariño como corresponde.

¡Gracias!, palabra que lleva en sí
amor a quien la recibe,
reconforta al que la escucha;
le dice que un bien ha hecho,
que en otro ha pensado mucho.

Y cuando has dado las gracias
la calma llevas a tu espíritu.
Sientes que has quedado en paz
con el otro y contigo mismo, y muestras
que valoras mucho lo que has recibido.

 El agradecimiento es la esencia de la bondad,
del bien hacer, del deber cumplido.
Es un gesto que acaba un ciclo:
le abre lo que tú recibes de otro,
y le cierra el agradecimiento tuyo.

Yo le pregunté:
¿Y cuando no hay agradecimiento?
Él me contestó: sientes incertidumbre,
dudas, intranquilidad;
no puedes dejar de pensar
que una deuda tienes que saldar.

Por esto, por tu buen hacer,
solo tengo para ti palabras bonitas.
Porque traes el descanso,
la conciencia dejas tranquila,
saldas las cuentas pendientes,
y el alma se llena de dicha.

Contigo viene el reposo, la serenidad,
la paz de haber hecho lo debido.
No en vano de estas bondades
un refrán ha nacido: ¡Es de bien nacidos
ser agradecidos!


Autora: Rosa María Boal Herranz


No hay comentarios:

Publicar un comentario